Medio mundo en La Habana

La Habana será, del 11 al 16 de septiembre, capital de los países del Tercer Mundo, cuando más de un centenar de ellos esté presente en la Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, muchos representados por sus respectivos jefes de Estado o Gobierno y otros altos dignatarios.
Los presidentes de Venezuela, Bolivia, Argelia, Ecuador, Paquistán, Irán, Filipinas, Laos, Sudáfrica y el Emir de Qatar, entre otros, aseguraron la participación en la Cumbre del NOAL, que tiene el propósito de convertirse en hito para el Movimiento que agrupa a la mayoría de los países del Sur.
El hecho constituye un reconocimiento a los esfuerzos de Cuba en favor de los derechos de los pueblos a la autodeterminación, la soberanía, el desarrollo económico, a la inclusión social, y su contribución a eliminar ese flagelo que es el analfabetismo, reducir las tasas de mortalidad infantil y materna, erradicar enfermedades y evitar muertes por falta de asistencia médica. Son miles los médicos cubanos que prestan asistencia a pueblos hermanos, al igual que los maestros ayudan a erradicar la ignorancia, porque desde Martí, nuestro Héroe Nacional, sabemos que sin cultura no hay libertad posible.

Esperemos que los debates de esta Cumbre marquen un nuevo hito en esa lucha por un mundo mejor, que es posible.

Paralelamente a la reunión de los NOAL se realizará en La Habana la primera Cumbre de Países en Desarrollo sin Litoral, y la reunión del Grupo de Alto Nivel para la Consulta y la Cooperación Sur-Sur, más conocido como el G-15.
Ambas reuniones de alto nivel, previas a la XIV Cumbre del MNOAL, sitúan a Cuba en el centro de la atención mundial, y dan fe de la ascendencia internacional del país anfitrión.
El Palacio de Convenciones, el Hotel Palco, el Centro de Prensa y el aeropuerto internacional José Martí, entre otros sitios, están prácticamente listos para acoger a un foro que preconiza el multilateralismo en tiempos de unipolaridad.
En Cuba ya se respira ambiente de Cumbre, no solamente entre los habitantes de la Isla. También entre los miles de jóvenes del Tercer Mundo que aquí se forman como médicos y en otras profesiones, quienes compartirán la hospitalidad cubana con sus mandatarios y representantes.